BLOG DE VIAJES 8
De Innsbruck, Austria a Lucerna, por Alemania
Recorrida por el oeste de Austria, Baviera y noreste de Suiza
CARACTERISTICAS Es una de las zonas más preciosas de los Alpes. Caminos muy transitados. Ciudades pequeñas y muy turísticas. Cultura seria y rigurosa. Paisajes inolvidables de alta montaña.
HISTORIA Arquitectura tradicional alpina. Barroco alemán y Rococó
CLIMA Ideal todo en otoño y primavera o verano. Desaconsejable durante el invierno por sus bajas temperaturas.
COMIDAS TÍPICAS Quesos y embutidos en todas las variedades. Vinos blancos y tintos. Cervezas de todos los gustos. Racletes, fondiú y mucho cerdo y patos. Pastelería exquisita. Chocolatería y golosinas
RECOMENDACIONES En cada localidad, visitar la Oficina de Turismo local. El GPS es óptimo, especialmente en Austria, por las dificultades del idioma. Con el GPS marcar tramos cortos y reprogramar al próximo destino. Escuchar por radio, las estaciones locales, familiarizándose con el idioma. Llevar equipo para picnic. Las paradas en la ruta son necesarias y existen excelentes lugares. Los alpinos (suizos, austríacos y alemanes) hacen de los pic-nic una cultura saludable. Puntualidad absoluta. Orden y limpieza hasta en las carreteras más altas e inhóspitas. Idiomas muy difíciles. Usar traductores
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INSBRUCK
Capital del Tirol, ciudad de antiguos orígenes sobre el Río Inn, es un nudo importante de comunicaciones entre Italia, Alemania y la propia Austria. Notable población industrial, conocida estación de deportes de invierno y varias veces sede de las Olimpiadas. Durante el imperio romano se llamó Veldidena y desde 1180 lleva su denominación actual. Tuvo su splendor durante el reinado del emperador Maximiliano I Habsburgo, desde 1493 al 1519.
En el corazón de los Alpes se mezcla el pasado con el futuro: en Innsbruck sus monumentos de fama mundial son testigos de una gran historia y conviven con su excelente arquitectura posmodernista internacional. Es imperdible visitar estos lugares:
Hofkirche, la iglesia del emperador. Construida por el emperador Fernando I, la iglesia es un monumento dedicado al emperador Maximiliano. Su interior ofrece un impresionante diseño renacentista y gótico tardío alemán. Su belleza llama la atención por sus elaborados cromatismos, el majestuoso altar, las galerías y las columnas de mármol rojo.
El cenotafio de Maximiliano, que descansa en esta iglesia, es un magnífico testimonio de la escultura alemana.
El Castillo Imperial Hofbrug. Sede del gobierno imperial, muestra el lujo de las habitaciones de María Teresa y del matrimonio de Francisco José y Sissí, como también otras variadas dependencias, como la Sala del Trono, carruajes y demás.
El Tejado de Oro El Goldenes Dachl está hecho con más de 2500 tejas de cobre doradas al fuego. Constituye un símbolo de la decadencia austríaca y acogió la boda del emperador Maximiliano con Bianca Maria Sforza. Todo el edificio está decorado con murales, escudos de armas y frescos.
Columna de Santa Ana. La hermosa y majestuosa Columna conmemorativa de la liberación frente a las tropas bávaras, se encuentra adornada por estatuas y esculturas de querubines situados en su base.
El teleférico Nordkette. En un día despejado ofrece, posiblemente, las vistas más impresionantes del mundo, así como senderos alpinos y pistas de esquí de primer nivel internacional.
Swarovski Crystal Worlds. Nació como museo en 1995, con el propósito de celebrar el centenario de esta compañía. En la actualidad ofrece una experiencia completa a sus visitantes ya que recorre el laberinto subterráneo de cristal y admira una de sus joyas principales: Crystal Cloud, una impresionante creación con más de 800 000 cristales de Swarovski manufacturados, capaces de brillar sobre un espejo negro.
Nos alojamos dos veces en esta ciudad, en el “Hotel Roter Adler” (3 estrellas) y “Hotel Europa Tirol” (5 estrellas). No perderse de comprar cristales de Swarovski (si puede), probar la auténtica tarta Sacher y el Strudel de manzana, más rico de Austria.
Desde Insbruck conviene tomar la Autopista A12 directa a Salsburgo (163Km) con paisajes notables. Casi a la salida, bajar en Hall in Tirol, solo si se dispone de tiempo, para recorrer esta hermosa y típica ciudad tirolesa, antigua capital de la Sal, desde la época romana. En Wörgl desviar a Autpista E60 a Salzburgo, Extrañamente e imperceptiblemente se transita un trecho por Alemania y próximos a Salsburgo, de nuevo en Austria, llegando a destino.
SALZBURGO
Es la ciudad de la Música y de Mozart. Patrimonio Cultual de la Humanidad y extraordinariamente bella por donde se la mire. Posee todos los elementos típicos de una ciudad de postal centroeuropea: castillo en una pequeña colina, iglesias barrocas con pintorescos campanarios, lujosos palacios con cuidados jardines, amplias avenidas peatonales y en medio de todo, un fotogénico río, el Salzach.
Fortaleza Hohensalzburg. Ubicada en el corazón de la ciudad sobre un pequeño promontorio, esta fortificación fue construida en el 1077, aunque su aspecto actual se debe a las ampliaciones y mejoras del año 1500. Hohensalzburg, que nunca pudo ser tomada por los enemigos del principado, es hoy una de las fortalezas más grandes y mejor conservadas de Europa.
Dom Quartier (Barrio de la catedral) es un enorme recinto desde el que antaño ejercieron su poder los príncipes-obispos de Salzburgo y que hoy constituye el corazón del casco, está formado por la Catedral, la Alte Residenz (Antigua Residencia), el Monasterio de San Pedro y la Iglesia Franciscana.
Las huellas de Mozart. En la ciudad que vio nacer a Mozart, no podían faltar unos cuantos monumentos y museos dedicados al gran compositor. El más relevante es la Casa Natal de Mozart, ubicada en el Nº 9 de Getreidegasse, una de las principales avenidas de Salzburgo. Allí, el 27 de enero de 1756, nació el genio de la música clásica. Hoy su antigua casa (lo fue durante casi dos décadas) es un museo dedicado a su vida, lleno de documentos personales, retratos, instrumentos históricos, etc.
Palacio Mirabell. Construido en 1606 por el príncipe-arzobispo Wolf Dietrich, este magnífico palacio de estilo barroco destaca por sus bellísimos jardines de 1690. Con la catedral y el castillo como telón de fondo, Mirabell es uno de los lugares más fotogénicos de la ciudad.
Siendo una ciudad tan concurrida, resulta caótico llegar en auto, en gran medida por el idioma y sus intrincadas calles. Existen dos estacionamientos a bajo nivel, por lo que conviene realizar todos los trayectos caminando.
Por supuesto que no podemos escapar de encontrar constantes referencias de las películas filmadas en sus calles: “La Novicia Revelde” sobre la verdadera historia de la familia von Trapp y “Amadeus”.
La alegría y la música es una constante: en cada recodo, vereda o plaza, algún solista o conjunto de músicos amenizan con su repertorio. Teniendo en cuenta que la hotelería es muy cara, conviene dirigirse a la pobación vecina, tan solo unos 5 km, pero cruzando la frontera Austria-Alemania.
BAD REICHENHALL
Es una ciudad jardín, famosa por sus baños y la producción de sal, desde la prehistoria. Sus aguas salitrosas tienen poderes curativos y son notables sus lagos subterráneos.
Nos alojamos en el fabuloso “Hotel Steigenberger” (5 estrellas) y por ser tan bonito, por sus baños, parques y jardines, destinamos buen tiempo al relax.
Desde Bad Reichnhall, tomar la Autopista E8, pasando por paisajes hermosos de la Baviera alemana.
BAVIERA
Es un país dentro de Alemania y sus habitants visten casi permanentemente pantalones cortos de cuero con sombreros chicos de fieltro emplumados y las mujeres sus trajes típicos finamente bordados. Los paisajes son los más bonitos del país y todo prolijamente ordenado, parece escaparse de un cuento de hadas.
En la Autopista, pasando Rosenheim, desviar por ruta secundaria R472 y dirigirse a Bad Tölz, al pie de los Alpes Bávaros. En realidad todas estas localidaes son una invitación a quedarse para conocerlas, pero resulta imprescindible avanzar hasta llegar a destino.
GARMISCH- PARTENKIRCHEN
Estas ciudades gemelas (unidas en 1935) forman uno de los centros turísticos más importantes de Baviera y de Alemania. Hermosamente situada bajo los Alpes, al pié del Zugspitze, la montaña más alta de Alemania a 2.962 metros, ha sido sede de los Juegos Olímpicos de 1936 y 1978 y resulta un paraiso para los viajeros, tanto en invierno, como en el verano
Nos alojamos en el “Grand Hotel Sonnenbichl” (4 estrellas superior) y conviene hacer centro en esta ciudad para recorrer varias localidades, todas muy cercanas, de tal manera de ahorrarse las molestias de trasladar valijas y equipajes.
La ciudad tiene dos lados distintos. La parte de Garmisch tiene un aspecto moderno, con más bares y restaurantes, mientras que en las calles de Partenkirchen abundan los edificios históricos. Vecino a la ciudad, se puede realizar una caminata por el monumento nacional de Partnach Gorge, gargantas de piedra natural y estrecho valle con cascadas, témpanos gigantes y paredes de piedra caliza. El sendero está abierto todo el año. En el invierno, la zona es especialmente bella, ya que las excursiones son guiadas por antorchas.
Localidades cercanas, que según la disponibilidad de tiempo se pueden visitar correlativamente o por jornadas, o medias jornadas.
OBERAMMERGAU
Es un pueblo alpino tipicamente hermoso, con las fachadas de las casas pintadas con escenas alusivas a las costumbres y religión, además de estar profusamente arbolada y con flores multicolores en cada balcón. La actividad principal es la fabricación de figuras religiosas talladas en madera. Pesebres, santos , ángeles y todo tipo de objetos ornamentaes.
Cada diez años, 2000, 2010, 2020…y desde hace siglos, se realizan los Juegos de la Pasión, que es una representación de los últimos días de Cristo, su Muerte y Resurrección, con la participación de más de 1.700 actores, todos habitantes del pueblo y durante cuatro meses seguidos, en un estadio semicubierto. (Asistimos en el 2000).
ETTAL
Espléndido monasterio benedictino, con una insólita iglesia de doce lados y cúpula central decorada al más puro estilo barroco alemán y profusamente dorada y pintada con más de 400 figuras de santos y ángeles alados.
LINDERHOF
De los tres castillos construídos por el Rey Loco, Luis II de Baviera, éste es el más atractivo por sus jardines formales y entorno boscoso. El soberano tuvo la intensión de copiar a Versalles y no lo pudo terminar, no obstante construyó esta villa rococo, con un spectacular salón de los espejos y gran comedor. El primer plan de iluminación eléctrica, se utilizó para alumbrar sus cuevas y jardines.
HOHENSCHWANGAU
Es el segundo Castillo de este mismo rey, edificado anteriormente, pero habitado por él y su amigo Richard Wagner, mientras componía sus operas y sinfonías. Ubicado próximo a la localidad de Schwangau, el palacio está repleto de rarezas.
NEUSCHWANSTEIN
Es la gran creación de Luis II, aunque inacabado al momento de su misteriosa muerte, sigue siendo el más fantastico castillo romántico de cuentos de hadas que hay en el mundo. Los arquitectos crearon esta obra maestra de fantasia pseudomedievalista, con referencias al mundo ideal de las operas de Wagner.
Recomiendo acceder a su empinada cuesta por medio de unos simpáticos carros tirades por caballos, munirse de mucha paciencia para ingresar (filas de hora y media) y luego de la visita, dirigirse al puente colgante vecino, para admirar su notable arquitectura y los paisajes circundantes.
Desde el corazón de la Baviera, dirigirse hacia el oeste, tomando varias rutas secundarias, debidamente señalizadas, rumbo al Lago Bodensee. En el trayecto montañoso y bordeando los altos Alpes, dejar de lado localidades encantadoras y un paisaje inolvidable. LLegar a Lindau.
LINDAU
Se encuentra en el extremo oriental del Lago Bodensee, más conocido por Lago de Constanza, el segundo mayor de los lagos alpinos, luego del de Ginebra. El paisaje es verdaderamente maravilloso. Desde allí y bordeando el lago, llegar al Puerto de Meersburg, donde se puede cruzar a Suiza, por medio de balsas o ferrys, que unen los dos puertos cada 30 minutos y llegar a destino.
CONSTANZA
Aunque está ubicada del lado suizo, es una ciudad alemana y el Río Rin, justo donde se inicia, hace de frontera entre los dos países. Historicamente, la ciudad fue refundada por los romanos en honor a su emperador Constantino, años después Barbarroja firmó un Tratado de Paz con los lombardos en 1183 y entre 1414 y 1418 se celebró en esta ciudad el Concilio de Constanza, que dio fin al Cisma de Occidente y favoreció el reconocimiento y el crecimiento de la ciudad.
El Concilio, al comienzo del cual llegó a haber incluso tres Papas diferentes, concluyó con la elección de Martín V. Este hecho la convierte en una de las escasas ciudades europeas donde se ha elegido un Papa y la única en suelo alemán que goza de este honor. Otro hecho histórico de este periodo en la ciudad es que fueron quemados en la hoguera el reformador Jan Hus (1415).
Recomiendo alojarse en el “SeeHotel Siber” (4 estrellas) frente al lago, con vistas estupendas y servicio de media pensión. Recorrer la ciudad medieval, entrar en la catedral de Nuestra Señora y despedirse de Alemania, gustando una exquisita torta Baiser- Käsekuchen (pastel de queso con merengue), con una buena cerveza Paulaner Dunkel que combina malta de cebada y malta de trigo tostada en mayor proporción y es de las más tradicionales en los Alpes.
Desde Constanza, cruzar la inmediata frontera Alemania-Suiza y bordeando el lago, llegar hasta St. Gallen, ciudad importante pero sin mayor atractivo. Continuar por la Autopista N7 y terminar el recorrido en Lucerna, pasando antes por la populosa Zurich.
ZURICH
Suiza es el país más caro del mundo y Zurich es el corazón del capitalismo, meca de las finanzas mundiales pero también una ciudad repleta de cultura. Tranquila y silenciosa, fue elegida dos veces como la ciudad con mejor calidad de vida del mundo y los salarios son los más altos de Europa.
Recomiendo alojarse en un hermoso hotel, algo alejado del centro “Hotel Sheraton” (4 estrellas) con fondos que dan directamente al campo. También sugiero hacer un paseo en barco de hora y media que muestra un panorama diferente de las poblaciones de alrededor del lago de Zurich, como Thalwil y Erlenbach.
Desde allí se obtiene una vista espectacular de la metrópoli y de la arquitectura de finales de siglo XIX. Será un camino pintoresco en el que se disfruta de los cisnes que danzan en el lago con vistas hacia los Alpes y sus picos nevados e imponentes. Antes de dejar la ciudad, se pueden visitar alguno de los 50 museos o casi 100 galerías de arte o conocer la Grossmünster, una iglesia románica fundada por Carlomagno.
Desde Zurich a Lucerna por la Autopista N40 y luego la N14, apenas unos 63 Km por una ruta muy transitada en cada momento del día. Llegar a destino
LUCERNA
Ciudad muy hermosa, comentada en este Blog, en el viaje Nº3
Fin del recorrido.