BLOG DE VIAJES 21
De Venecia a Zagrev y sur de Croacia
Recorrida por cinco países del este de Europa Oriental (Plano de la Ruta de Viaje al final de las fotos.)
CARACTERISTICAS Zonas desconocidas de Europa. Caminos muy transitados. Ciudades pequeñas y muy turísticas. Cultura seria y rigurosa. Paisajes inolvidables de baja montaña y bosques.
HISTORIA Ciudades y paisajes de las Guerras Mundiales. Arte renacentista y barroco Cultura musulmana
CLIMA Ideal todo en otoño y primavera o verano. Desaconsejable durante el invierno por sus bajas temperaturas.
COMIDAS TÍPICAS Quesos y embutidos en todas las variedades. Vinos blancos y tintos. Cervezas de todas las variedades. Carne de cerdo, vacuna y aves- Pastelería exquisita
RECOMENDACIONES Mucha dificultad con los idiomas. En cada localidad, visitar la Oficina de Turismo local. El GPS es óptimo, pero nada se iguala a los planos a escala. Con el GPS marcar tramos cortos y reprogramar al próximo destino. Escuchar por radio, las estaciones locales, familiarizándose con el idioma. Por el idioma, reservar con anticipación la hotelería. Puntualidad absoluta. Orden y limpieza hasta en las carreteras más inhóspitas. Tránsito intenso y muy controlado
VENECIA
Vivencias, hoteles y recomendaciones en el Blog Nº6 (de Milán a Venecia).
Partida desde Venecia a Mestre por Autopista E70 pasar por:
Portogruario. Hermosa ciudad medieval influenciada por la arquitectura e historia de Venecia, con un extraordinario museo, el National Museum of Concordia, con piezas romanas de las excavaciones de la colonia romana Iulia Concordia y Concordia Sagittaria.
Al llegar a Palmanova, se toma el empalme a la Autopista E55 hacia el norte de Italia y Austria.
Palmanova.
La ciudad fortificada en forma de estrella de nueve puntas, es un municipio de la provincia de Udine en la región de Friuli-Venecia Julia, considerada la ciudad más perfecta, incluida en 2017 en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
La región se caracterizó por una serie de conflictos y Palmanova pasó por muchas manos después de formar parte de la República de Venecia durante más de 200 años. Fue conquistada por Napoleón Bonaparte; permaneció como parte del Imperio Habsburgo hasta que finalmente, fue conquistada y anexionada al Reino de Italia.
A pocos kilómetros se llega a :
UDINE
Hermosa ciudad, nacida en el Medioevo con varios monumentos importantes:
Plaza de la Libertad. Rodeada por nobles edificios de épocas diversas: el Arco Bollani, proyectado por Palladio en 1555, el Pórtico de San Juan, con la alta Torre del Reloj, construido en el siglo XVI y el Palacio del Comune de estilo gótico. (1456).
Castillo. Fue erigido en el siglo XVI con proyecto de Fontana; la entrada principal está precedida por una gran escalinata.
Catedral. El duomo fue construido entre los siglos XIII y XIV y reconstruido en el periodo barroco y en su interior hay pinturas de Giambattista Tiépolo. Y su hijo Giamdomenico.
Continuando por la Autopista, se asciende hacia los Alpes, con paisajes de montañas, arroyos y pequeñas localidades. Cruzar la frontera Italia – Austria y llegar a destino, Villach y luego Klagenfurt.
El Ducado de Carintia fue un ducado situado en los territorios que actualmente conforman parte del sur de Austria y del norte de Eslovenia. Formó parte del Sacro Imperio Romano Germánico desde el año 976 y del reino de Austria-Hungría hasta su disolución en 1918. Por el Tratado de Saint-Germain (1919) la mayor parte del ducado pasó a integrar el estado austriaco de Carintia.
VILLACH
Debido a su localización es un importante nudo de comunicaciones en la zona. Tiene una población de más de 57 mil personas, lo que la convierte en la séptima ciudad austriaca más habitada. Poblada desde la edad de piedra, en época de los romanos constituyó una estación termal. Rodeada de lagos, grandes y pequeños, es una ciudad destruida por tres incendios y las bombas nazis, pero reconstruida con empeño. Conviene trasladarse a Klagenfurt, capital de Carintia, a orillas del Lago Worthersee.
KLAGENFURT
Es la capital de la región y aquí es donde se encuentran los monumentos y museos arquitectónicos más impresionantes. El programa de excursiones imprescindibles incluye visita a Landhaus y caminar a la fuente de Lindwurm; Esos son los principales símbolos de la capital. Vale la pena destacar el Museo de Heráldica, Diozesanuseum, Palacio Arzobispal, la Catedral y Neuer Platz.
Además, la ciudad tiene un gran zoológico y planetario esperando a los viajeros más jóvenes. Hay conferencias fascinantes para los niños que cuentan mucho sobre el mundoy el espacio.
Lago Worthersee. Iimpresionante lago que cuenta con algunas de las aguas más cálidas del país. Se puede tomar ferries de temporada que llevan a los pasajeros a través del lago a varios destinos. Una de las excursiones más populares es realizar un paseo en barco por la noche en el lago. Todos tienen playas y acogedores hoteles de gestión familiar. Debe señalarse que el agua de los lagos locales se investiga repetidamente para detectar contaminación; y el agua es literalmente, pura como cristal.
Minimundus. En el sur de Klagenfurt, la capital de la región austríaca de Carintia, encontramos la que quizá pueda ser la atracción más importante de este país, y una de las más visitadas en la Unión Europea. Fue inaugurado oficialmente el 3 de julio de 1959 y pertenece a la asociación Rettet das Kind (Salvemos al niño) Hay una enorme exposición de modelos de edificios famosos, antiguos y modernos; los más conocidos del mundo, realizados con gran detalle y a escala 1:25, impresionantes, algunos han necesitado para construirse hasta 6 años, siendo el más costoso y realmente bello el de La plaza de San Pedro del Vaticano, invirtiendo esos 6 años en construirlo y con un coste de unos 730.000 euros. Os cito por ejemplo, el Taj Mahal de la India, la Torre Eiffel de París, la Estatua de la libertad de Nueva York, la Torre de Londres, el Atomium de Bruselas, el Partenón de Atenas, el teatro de la Ópera de Sydney, la torre de Pisa…así hasta 150 reproducciones.
Hay una variedad notable de hoteles frente al Lago. Sugiero el “Hotel - Restaurant Soleo” (3 estrellas) se encuentra a orillas del lago y muy cerca de la ciudad Para comer, hay una abundancia de platos originales de pescado. En total, hay más de mil lagos en la región que siguen siendo la principal fuente de peces. Puede ser frito con especias, añadido a las sopas y pasteles o como una adición a ensaladas de verduras frescas. Para el postre, uno de los más populares es Reindling, pastel con canela y pasas, que se complementa con el vino de manzana.
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Tomar Autopista A11, luego denominada E61 hacia Liubliana. Pasar por un túnel extenso, el Karawanken, de casi 8 km de largo y llegar a la Frontera Austria – Eslovenia.
Eslovenia. Es sencillamente una maravilla. Estimo sin dudar, que es el país más armónico, educado, culto, ordenado y limpio del mundo. Es una mezcla ideal de Austria más Suiza
Nunca me canso de ponderar la arquitectura fantástica y variada, los excelentes vinos y platos tradicionales, la vibrante cultura popular. Sin embargo, para mí el mayor atractivo del país son los propios eslovenos: reservados y serenos, harto seguros de sí mismos y muy hospitalarios. Su increíble mezcla de climas lleva las brisas cálidas del Mediterráneo a las faldas de los Alpes, con más de la mitad de su territorio cubierta de bosques, Eslovenia es uno de los países más verdes del mundo.
Pasar por la ciudad de Jesenice y en Lesce, tomar ruta hacia la derecha rumbo destino.
BLED
Es una población situada a orillas del lago Bled y ubicada en los Alpes Julianos a 50 kilómetros al noroeste de la capital del país, Liubliana. Es especialmente famoso por su lago glacial, el cual atrae a numerosos turistas durante todo el año. En los bosques circundantes hay varios castillos e iglesias.
El Lago Bled, es uno de los lugares más pintorescos y mágicos que podrá encontrar en Europa. El impresionante paisaje del lago, de apenas dos kilómetros de longitud y rodeado de centenares de árboles le enamorará al instante. En el centro del lago, sobre las aguas, sobresale una pequeña isla de apenas 180 metros de longitud y completamente poblada de árboles. Una diminuta iglesia barroca se levanta en la isla, casi cubierta por la forestación.
A orillas del lago Bled existe otro lugar que añade más belleza al entorno y es el castillo. La fortaleza, de origen medieval, está construida sobre un enorme acantilado a 130 metros de altura sobre el agua, que parece hecho únicamente para sostener el fuerte. Desde las almenas del bastión podrá disfrutar de una de las vistas más espectaculares del lago Bled.
El castillo de Bled, Eslovenia, parece sacado de un libro. Cuenta con todos los elementos clásicos de los castillos de Europa. Un puente levadizo que salva un foso defensivo, por ejemplo. Además, cuenta con una torre de estilo románico que tiene más de mil años de antigüedad.
Disfrutando de su encanto y del espectacular paisaje natural, resulta imprescindible probar la joya culinaria del lugar: la tarta de crema de Bled, o Kremna Rezina, un dulce exquisito a base de crema dulce, vainilla y tapas de hojaldre. Disfrute de este dulce en un lugar inimitable.
Regresar a la Autopista E61 y llegar a destino.
LIUBLIANA
La capital de Eslovenia, es una ciudad cargada de encanto. De pequeño tamaño, ideal para pasear y relajarse, que nada tiene que ver con el resto de las capitales europeas y de la que nos enamorados desde el primer momento. Sus calles proclaman alegría, cultura, historia y además, en 2016 fue nombrada capital verde de Europa.
De forma increíble continúa siendo una gran desconocida para el turismo. Fundada como un campamento romano, Liubliana ha pasado por una turbulenta historia hasta llegar a su independencia de la antigua Yugoslavia en 1991. Las continuas guerras y los repetidos terremotos han hecho mella y modificado su arquitectura, por ello sus edificios presentan una mezcla de estilos de varias épocas.
Entre edificios y calles siempre hay un símbolo presente en Liubliana, el dragón: según la leyenda, tras haber encontrado el vellocino de oro, Jasón y los Argonautas remontaron el lugar y venció a un monstruo, el dragón de Liubliana, que en la actualidad está presente tanto en el escudo como en la bandera de la ciudad.
Su casco histórico, está formado por callejuelas adoquinadas y edificios de tonos pastel, toda una joya en la que predominan los estilos barroco y art noveau.
La Plaza Preseren es la más famosa de la ciudad, está situada junto al río Ljubljanica y las vistas al castillo desde ella son magnificas. Entre los edificios destaca la Iglesia Franciscana de la Anunciación, de estilo barroco, con una característica fachada de tono rosado y con un interior con interesantes frescos.
Frente al Ayuntamiento encontramos la conocida como Fuente de los Tres Ríos y que representa a los tres ríos de Carniola: Ljubljanica, Sava y Krka, y en mitad de la cual se eleva un obelisco de diez metros de alto. Fue construida en 1743 inspirada en la famosa fuente de los 4 ríos de Bernini, en la Plaza Navona de Roma.
Junto a ellos se levanta la imponente Catedral de San Nicolás, construida en el siglo XVIII y de estilo barroco. Además de su cúpula destacan las dos puertas donde se cuenta la historia del cristianismo esloveno. El mejor lugar para tomar el pulso de la ciudad es su Mercado al aire libre de la Plaza Trznica.
En Liubliana existen un gran número de puentes cargados de historia como su famoso Puente de los Dragones, llamado así por estar flanqueados por cuatro enormes dragones, el símbolo de la ciudad, fue construido sobre otro antiguo, destruido durante un terremoto, y es el primer puente de hormigón armado de Europa.
Dominando y protegiendo Liubliana, desde lo alto de la colina de Grad, se levanta el imponente Castillo de Liubliana, visible casi desde cualquier punto de la ciudad. Su origen data de 1444, pero fue reconstruido durante el siglo XV, en la actualidad sirve fundamentalmente como centro de exposiciones y museo.
Nos alojamos en el muy moderno “Radisson Blu Plaza Hotel Ljubljan” (4 estrellas) con media pensión, algo alejado del casca histórico, pero en un barrio muy actual.
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Partir desde Liubiana hacia el este por la E57, rumbo a Maribor, por la región noroeste llamada Baja Estiria, parte de aquel Ducado de Estiria que quedó en manos del Reino de Yugoslavia tras la I Guerra Mundial y cuya capital es precisamente Maribor. A medio camino, detenerse en una hermosa localidad, joya de la arquitectura.
CELJE
Empezando por el considerado castillo más grande de todo el país, el Castillo de Celje. En la Edad Media, todas estas tierras de la Baja Estiria fueron gobernadas por varias dinastías como los Condes de Celje, Además de ser el más grande, fue el más importante de Eslovenia y todos los Alpes orientales porque llegaba a cubrir casi 5500 m2.
Entrar en esta imponente fortaleza es adentrarse en una renovada construcción, con partes todavía en ruinas, que combina el legado gótico, románico e incluso del renacimiento. Las murallas perimetrales son imponentes y fruto de su desarrollo arquitectónico, en épocas en que ejercía un gran papel económico. Sin embargo, su cada vez mayor pérdida de importancia estratégica lo llevó a un sucesivo deterioro hasta el abandono definitivo en 1795. Fue restaurado en nuestros tiempos.
Retomando la Ruta E57, llegara destino
MARIBOR
Es la segunda ciudad más importante de Eslovenia, centro universitario (en 1975 fue fundada la Universidad de Maribor con 17 facultades) y capital europea de la Cultura en el 2012, ciudad del vino y las manzanas.
El Casco histórico está centrado en la Plaza Glavni, donde se ubica el Ayuntamiento y la Columna Votiva, un símbolo que no olvida la plaga de peste que arrasó Maribor. En todo el ámbito se respira cultura por los cuatro costados y esto se puede constatar en la Plaza Slomsek, aquí conviven el Teatro Nacional, la Universidad, la Sede Central de Correos, y la Catedral de San Juan Bautista del siglo XII.
Otra iglesia de bella factura es la de los Franciscanos, con su ladrillo rojo y dos campanarios en la fachada. Junto al castillo de la ciudad están las Bodegas subterráneas Vinag de la que dicen que es la bodega más grande de Europa con sus 20.000 metros cuadrados y una de las más antiguas. Su edificio es de 1857 y tiene un laberinto subterráneo de 2,5 km. con sus vinos blancos muy famosos.
Por la Ribera del Río Drava nos encontramos con la Torre de los Judíos (Sodni Stolp), la Sinagoga y la Torre del Agua, hoy en día reutilizada como pinacoteca. Algunos museos de Maribor son la Galería de Arte, el Teatro de Marionetas, el Museo de la Liberación y el Museo del Vino.
Se puede apreciar en el Barrio Lent, una planta de vid reconocida por el Libro Guinness como la más antigua del mundo, con 400 años, también se puede ver el National Memorial Monument que es un monumento esférico de bronce en homenaje a los asesinados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
Maribor, al igual que todo el país, transmiten una sensación de magia y felicidad indescriptible. Es un estado extraño, que se percibe en el trato de la gente y en un ámbito sencillo y desprejuiciado. Estas connotaciones las percibí mayoritariamente en distintos viajes: en este país (Eslovenia), en Cracovia (Polonia), Siena (Italia), Placa (Atenas) y Zagreb (Croacia)
Continuar el viaje hacia el sur, rumbo a Croacia por la E59. A 27 kilómetros, otra joya:
PTUJ
La ciudad más antigua del país y posiblemente una de las más bellas de toda Eslovenia, con un casco histórico laberíntico, de calles medievales, edificios con tejados rojos, plazas, iglesias y terrazas por todos los lados.
La Iglesia de San Jorge en la plaza Slovenski se destaca por una pequeña escultura de madera del año 1380 y justo en frente, la Torre de la Ciudad, edificada en el S.XVI. Ésta viene a ser como una joya en medio de un museo al aire libre, ya que si bien es de estilo gótico, alrededor existen multitud de elementos romanos.
El Castillo de San Florian, domina y protege el asentamiento a orillas del río Drava, desde tiempos olvidados. El recinto hoy sirve fundamentalmente de exposición del famoso carnaval de Ptuj.
Retomando la ruta hacia el sur, directamente a Zagreb, se pasa por paisajes colmados de bosques de pinos, con profundas raíces en la prehistoria. Por la zona, vivieron nuestros remotos antepasados y dejaron sus huellas. Ingresar a la frontera Eslovaquia – Croacia.
Croacia Tras la guerra que asoló el país, Croacia ha reconstruido su infraestructura, revitalizando su imagen de país Mediterráneo con aguas cristalinas, ciudades medievales que mezclan la arquitectura occidental y oriental, el respeto por el medio ambiente y las tradiciones con la llegada de turismo. Está desarrollando un tipo de turismo basado en la sostenibilidad, en la que la cultura, la gastronomía y la naturaleza conviven con el visitante.
ZAGREB
La capital croata es una de las más agradables ciudades centroeuropeas; no demasiado grande y perfecta para una escapada de pocos días. Museos, música, diseño, arquitectura, gastronomía y, sobre todo, una animada vida al aire libre. Incluso en invierno, los zagrebinos se las ingenian para tomar café en caldeadas terrazas y disfrutar viendo pasar la vida, como solo ellos saben hacer.
Lo primero que te dicen cuando llegas a Zagreb es que se la conoce como “la pequeña Viena”. Realmente tiene un inconfundible aire del imperio. Los cafés, los pasajes comerciales acristalados, sus avenidas en forma de anillo enlazando varios parques, los tranvías, e incluso la gastronomía tiene un estilo que nos recordará a Viena.
La ciudad de las “corbatas” se divide en cinco áreas. La Alta, religiosa y antigua, Lateral, artesanal, bulliciosa y de diversión, el Centro, imperial y culta, Baja con oficinas administrativas y contra el río, moderna con edificios en altura.
Catedral. Pocas catedrales son también el edificio más alto del país, como ocurre con la catedral de Zagreb. Mientras se recorren las calles por la ciudad, las agujas de este gran monumento te servirán de brújula, pues son visibles desde todos los sitios. Frente a la catedral se ubica una enorme columna con la Virgen María esculpida en oro.
Alrededor se sitúa el Gornji Grad, conocida como ciudad alta, la parte histórica de la Ciudad Vieja. Presume de una impresionante arquitectura medieval y muchos lugares encantadores para pasear, como las iglesias de San Marcos y Santa Catarina, y la Puerta de Piedra, que alberga un santuario a la Virgen del Milagro.
Museo de las Relaciones Rotas. Este museo, uno de los más originales del mundo, está dedicado a las rupturas y las relaciones rotas. Galardonado con el Premio Kenneth Hudson al museo más innovador de Europa, expone posesiones personales abandonadas por antiguos amantes y sus curiosas descripciones.
Donji Grad. Es la ciudad baja, que acoge el centro cultural de Zagreb, muy inspirada en los edificios del imperio Austro-húngaro, casi todos los monumentos de color amarillo. Cuenta con ocho parques y jardines situados en torno a la Herradura de Lenuci y permite pasear por espacios tan llamativos como la céntrica plaza de Jelačića, el Museo Arqueológico de Zagreb, el jardín botánico, el Teatro de Operas y el Museo Mimara. Esta institución histórica alberga la colección de arte más apreciada de Croacia; expone obras de Bosch, Rubens, Goya y Claudio de Lorena. Cuenta con casi 4000 piezas.
El Mercado de Dolac. Abre todas las mañanas: un lugar genial para descubrir la gastronomía croata y comprar suvenires (artesanía, bordados y bolsitas de lavanda) bajo alegres toldos de color rojo. Se encuentra junto al llamativo campanario verde de la iglesia Santa María del siglo XVIII.
Nos alojamos dos veces en el mismo hotel, con una ubicación inmejorable, al frente de la plaza principal. “Hotel Dubrovnik” (4 estrellas) Lo más impactante de Zagreb, socialmente expresada, es su alegría contagiante y la famosa calle, de casi 3 km de largo, Radiceva, con una interminable serie de bares, cafés y restaurantes, animados todo el día.
Cada sábado por la mañana, entre las 11.00 y las 14.00 (antes o después de pasar por el mercado de Dolac) llega un ritual imprescindible en la ciudad, la “spica”: tomar un buen café o cervezas, mientras se contemplan las últimas tendencias en móviles y moda, poniéndose al día de lo que pasa en la capital croata. Los zagrebinos son muy golosos, por lo que cuentan con pastelerías de visita obligada, como Dinara, que prepara una estupenda variedad de delicias horneadas, como el pastel de hojaldre relleno de calabaza.
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Dejando la ciudad, tomar Autopista E70 hacia el sur- este. Cruzar el país croata, en un trayecto algo aburrido, sin localidades ni paisajes muy notables. Llegar a Slavonsky Brco, última ciudad lindando con el país vecino. Frontera Croacia – Bosnia Herzegovina.
Bosnia y Herzegovina Es un país de la península balcánica en el sureste de Europa. Sus zonas de campo tienen villas medievales, ríos y lagos, junto con los rocosos Alpes Dináricos. Escarpada y hermosa, fascina por ser un nexo entre Oriente y Occidente, resultado de la historia austrohúngara y de la otomana, que aquí se funden y pasan por un filtro eslavo.
Muchos todavía asocian el país con la desgarradora guerra civil de la década de 1990, que dejó cicatrices aún visibles, pero quien lo visite hoy se irá con el recuerdo de su gente cálida y humilde. Todavía suena a territorio en conflicto pero la guerra de Bosnia tuvo lugar en la década de los noventa del siglo pasado, duró dos años y medio y terminó en diciembre de 1995. Dicho esto, la sorpresa es encontrarse con un país balcánico en estado puro, una tierra de áspera belleza que conserva cicatrices de la guerra civil, los espantos arquitectónicos del período socialista son como borrones en un paisaje principalmente rural. Muchas pequeñas localidades bosnias se despliegan en torno a castillos medievales, rodeadas por macizos montañosos o cañones con cascadas.
Tomar Ruta M17, con paisajes hermosos, pero surcados con poblaciones enteras semi destruídas por la guerra. Edificios rurales a medio derrumbar, arroyos, puentes y colinas cultivadas. Pasar por Doboj y tomar la E73 hasta destino
SARAJEVO
La joya de Bosnia Herzegovina es su capital, una ciudad que tuvo un importante papel en la historia europea y que hace años recuperó la normalidad, para deleitar al visitante nuevamente con sus elegantes cafés y su animada vida nocturna. Lo mejor es deambular por sus callejuelas, y acercarse a Baščaršija, el antiguo y bullicioso barrio turco, un laberinto de patios y calles peatonales con pavimento de mármol llenas de mezquitas, artesanos del cobre, joyerías y restaurantes.
En la Stari Grad, la ciudad antigua, uno se siente casi como en oriente, entre sus bares y cafés donde se puede fumar shisha, comer el famoso cevapi bosnio (acompañado de yogur) o una típica baklava otomana con un café, también a la turca. A orillas del río y en las avenidas Ferhadija y Maršala Tita abunda la arquitectura austrohúngara.
Y como prueba de la tolerancia religiosa de Sarajevo, en un par de manzanas se encontrarán varias mezquitas, una sinagoga, la catedral ortodoxa de 1872 y la catedral católica.
Es imprescindible la visita (e irrenunciable foto) al Puente Latino, frente al Museo que hoy lo conmemora, donde el archiduque Francisco Fernando y su esposa fueron asesinados, atentado considerado históricamente como el desencadenante de la Primera Guerra Mundial, el 28 de junio de 1914.
Una visita al Museo de la Vida, depara tristeza e indignación por los horrores de una guerra tan cercana. Aún se pueden recorrer los últimos 25 de los 800 metros que tuvo el pasaje subterráneo de 150 centímetros de alto y 100 de ancho, por el que entraron armas, combustible y víveres a la ciudad y que fue también la única vía de escape durante los 30 meses que duró el asedio de las fuerzas serbobosnias.
En este sorprendente establecimiento, los huéspedes pueden imaginarse cómo era la vida de los sarajevitas durante la guerra de 1992 a 1995, que enfrentó a musulmanes, serbios y croatas de Bosnia y causó unos 97.000 muertos. Sólo en Sarajevo hubo más de 11.000 víctimas mortales, 1.100 de ellas niños.
Nos alojamos en el “Hotel Hollywood” (4 estrellas) con media pensión, piscina, sauna, gimnasio, que en la práctica no se utilizan.
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Dejar Sarajevo y tomar la Ruta E73, hermosos entornos de montañas, valles, ríos y pintorescas localidades. Lo más bonito del circuito por este país. En Konjic, detenerse frente al lago para un descanso. Hermoso lugar. Continuar y llegar a:
MOSTAR
La historia reciente de Mostar no es demasiado alegre: su famoso puente otomano, el emblema de la ciudad, fue destruido por los croatas durante la guerra de los Balcanes. Otra de las cicatrices de aquellos años está en sus cementerios musulmanes, con multitud de lápidas fechadas en 1993, año en el que Mostar fue sitiada y bombardeada por la autoproclamada República Croata de Herzeg-Bosnia.
Además, casi la mitad de los edificios está en ruinas, como si la guerra hubiese terminado hace unas horas. Pero a Mostar se acude ahora a descubrir la ciudad vieja y admirar el Stari Most, el puente más famoso de la región balcánica, un majestuoso arco de piedra entre torres medievales, magníficamente reconstruido y convertido, nuevamente, en monumento a la identidad cultural y étnica de los bosnios.
Al ponerse el sol, las luces de numerosos restaurantes parpadean al otro lado de los riachuelos. El “callejón dorado” de Kujundžiluk es un animado rastro. Y para ver la herencia otomana, se puede visitar la casa Muslibegovica, una de las construcciones mejor conservadas de la zona y convertida en museo local.
Continuar el viaje por la R424.llegar a unos de lugares más espirituales de Europa
MEDUJORGE
Es un sitio no oficial de peregrinaje católico desde la presunta aparición de la Virgen María en la Colina de las Apariciones en 1981. Hay una estatua de la "Reina de la Paz" marcando el sitio de la primera aparición y otra en frente de la parroquia de Santiago. Según los creyentes, goteaba un líquido de la estatua del "Cristo Resucitado" cerca de la iglesia y en el sur, se encuentra la Montaña de la Cruz, que tiene una cruz de cemento en su cima.
A partir del 24 de junio de 1981, la Virgen María se presenta diariamente, bajo la advocación de Reina de la Paz. Desde entonces, millones de peregrinos acuden anualmente a Medugorje, impulsados por la fe y el amor a María, o la simple inquietud por comprobar si ocurre allí algo fuera de lo normal. A cada uno de ellos, la presencia de María lo transforma de un modo diferente, pero todos coinciden en afirmar que los mensajes de la Madre deben ser escuchados y sobre todo vividos.
Muy cerca de la ciudad de la virgen María, se llega a una joya del Medioevo.
POCITELLI
Pequeño y rústico pueblo a orillas de un río, de la época de los cruzados, en su marcha hacia la Tierra Santa. Perteneció su castillo a los Caballeros Teutónicos Balcánicos.
Continuar el viaje y muy cerca llegar a la frontera Bosnia Herzegovina – Croacia.
DUBROVNIK
Edificada en una península de la costa dálmata, la “Perla del Adriático” fue una importante potencia marítima mediterránea desde el siglo XIII. A pesar de los graves estragos provocados por un terremoto ocurrido en 1667, Dubrovnik ha conservado sus hermosos monumentos, iglesias, monasterios, palacios y fuentes, de estilo gótico, renacentista y barroco. Piedra y ladrillo se asocian para constituir la materia densa del marco arquitectónico. Dentro de las fortificaciones macizas, unos grandes edificios públicos, civiles y religiosos, se remontan al Renacimiento. Por su monumentalidad, evocan los tiempos prósperos de la pequeña república de Ragusa. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Murallas de la ciudad. Con una altura de hasta 22 metros, un grosor de entre 1,5 y 6 metros y unos 2 kilómetros de longitud, el recorrido por las murallas de la Ciudad Vieja de Dubrovnik es indispensable para contemplar toda la belleza de la villa desde otro punto de vista.
Gran Fuente de Onofrio. Esta construcción poligonal con 16 caños de agua en forma de máscaras, fue muy dañada en el gran terremoto de 1667, perdiendo parte de su belleza original. En los calurosos días de verano, decenas de personas se refrescan a su alrededor. A un costado se encuentra la oficina de turismo de la ciudad.
Calle Placa o Stradum. Es la vía principal del casco viejo y con sus 300 metros de longitud, desde la Puerta de Pile hasta el Puerto Viejo, están llenos de tiendas, bares y restaurantes. Además, la belleza de los edificios que la rodean y el pulimentado pavimento de mármol blanco, tanto a ambos lados se ven pequeñas callecitas de escaleras que suben hacia la montaña o callejones que van en dirección al mar, respectivamente.
Columna de Orlando. Es el símbolo estatal, ya que en su mástil se ondeaba la enseña nacional de la República de Ragusa, antiguo estado de Dubrovnik, y a día de hoy de la República de Croacia. Además, sirve como homenaje al héroe del siglo VIII, sobrino de Carlomagno, que supuestamente liberó Dubrovnik de los piratas árabes.
Palacio Sponza. Este edificio gótico renacentista, antiguamente utilizado como Aduana y Casa de la Moneda, aloja los Archivos Estatales y la sala memorial a los caídos durante la defensa de Dubrovnik en la Guerra de Independencia (1991-1995). Junto al palacio se encuentra el Campanario de Luža.
Iglesia de San Blas. Edificio construido a comienzos de siglo XVIII, ya que la iglesia que anteriormente se ubicaba aquí fue destruida en un incendio, quedando indemne únicamente una estatua de San Blas, en cuyo honor se erigió la nueva iglesia. Frente a esta iglesia está la pequeña fuente de Onofrio que, al igual que su hermana mayor, situada al principio de la calle Placa, fue construida y el Palacio Ducal, centro administrativo de la antigua República.
Toda la ciudad es sumamente bella, pero existe un rincón que merece detenerse y tomar un café, un helado o una copa de vino helado, probando un plato de pescado, recién salido del mar. En el Puerto Viejo está la Fortaleza de San Juan, construida en 1346 y entre barcos y yates anclados, el paisaje es único.
Nos alojamos en el otro extremo de la ciudad, sobre el mar, pero con vistas hacia el norte.” Valamar Lacroma Dubrovnik Hotel” (4 estrellas superior) con media pensión, piscina, sauna y demás comodidades. Por la belleza de la ciudad y sus hermosos entornos, merece quedarse por lo menos dos o tres días y gozar de sus playas de piedras y aguas absolutamente transparentes.
Turismo cinematográfico. Desde la grabación de “Juego de Tronos” se han popularizado las visitas guiadas recorriendo lugares de la serie. Para rodar el Episodio VIII de la saga de “Star Wars”, la ciudad se ha transformado completamente para adelantar unos siglos a la historia. La isla que emerge frente al puerto en la que se cuenta que Ricardo Corazón de León sobrevivió a un naufragio al regresar de las Cruzadas, han sido utilizados como escenarios para la serie “Los Borgia” Los productores de la serie “Missing” también han caído rendidos a los encantos de Dubrovnik, y ya en 1964 el director Roger Corman, eligió esta ciudad croata para “The Secret Invasion”.
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Partiendo de la ciudad y bordeando el límpido Mar Adriático, hacia el norte, por la única ruta, rumbo a Split. A 140 Km pasar por una localidad muy hermosa
MAKARSKA
Es una población con gran interés turístico, uno de sus mayores atractivos son sus playas y su centro balneario, además del ambiente que la rodea y de su especial clima mediterráneo que goza esta ciudad portuaria. Este enclave turístico fue habitado por griegos y romanos. Numerosas culturas han pasado y han dejado huella en esta localidad (eslavos, croatas, venecianos, turcos y austriacos). En su casco histórico se encuentra el Convento Franciscano de la Santa Cruz, con un claustro gótico del Siglo XV, además alberga un pequeño museo, que expone una curiosa colección de piezas marinas.
SPLIT
Es la principal ciudad de la región de Dalmacia y la segunda ciudad más populosa del país, después de Zagreb, de la que dista 380 km. Es un importante puerto pesquero y base naval del Adriático, así como un centro cultural y turístico importante; la ciudad antigua es una joya arquitectónica, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1979.
La ciudad creció alrededor de la casa de descanso del emperador romano Diocleciano, quien nació cerca de allí en el año 245 d. C. Se retiró en el año 305 al palacio que había construido cerca de Salona y fue sepultado allí en el 313. Fue el emperador que más persiguió a la religión cristiana. El palacio fortificado se convirtió después en una fábrica de uniformes romanos y luego de ser destruida por los bárbaros, una comunidad de cristianos refugiados convirtieron el palacio en una ciudad fortificada y el mausoleo de Diocleciano en la catedral de la ciudad.
El Palacio de Diocleciano. es la principal atracción de Split, antes llamada Spalato y a su alrededor se encuentran todos los monumentos y edificios emblemáticos de la ciudad.
Puertas del palacio. Son cuatro puertas del palacio, cada una abierta a un punto cardinal: Puerta de oro, hierro, plata y bronce. Hoy son puertas de piedra que se mantienen en su lugar original y la puerta de oro o Septemtrionalis es la más importante. El emperador Diocleciano la cruzó por primera vez el 1 de junio de 305
Catedral de San Duje (San Domnius). Originalmente era el mausoleo del emperador, pero fue convertido en catedral en el siglo VIII. Si bien no es muy grande, es increíble ver como la adaptaron para que funcione como una iglesia. La cúpula y la puerta de nogal tallada a mano son dignas de contemplar.
El templo de júpiter. A solo unos pasos en el mismo recinto se encuentra la cripta, también muy pequeña y contiene una estatua de la Virgen María. En este templo de planta rectangular se celebraba el culto a Júpiter.y se encuentra sobre un podio, con un pórtico de seis columnas.
Sótanos del Palacio. Al llegar a la puerta de bronce, se desciende al subsuelo y en la época romana, la función de los sótanos era la de elevar los apartamentos imperiales a la planta superior pero era también zona de almacenes del Palacio.
Vestíbulo. Se trata de la entrada a los antiguos salones imperiales y es una sala exteriormente cuadrangular e interiormente de planta circular, hoy se nos presenta monumental. Y como debe haber fascinado originalmente esos nichos semicirculares con estatuas y una gran cúpula cubierta por un brillante mosaico polícromado.
El Peristilo. Es la plaza central del Palacio, en torno a la cual había varios templos, se dedicó al emperador Docleciano, al que se le dio culto como el hijo vivo de Júpiter. El emperador aparecía bajo el arco central del pórtico, sus súbditos se le acercaban y se arrodillaban para besar el borde de su manto de púrpura o se postraban en el suelo frente a él.
El color rojo de las columnas de granito enfatiza la función ceremonial. Desde la época de Diocleciano el color púrpura se convirtió en el color del emperador. A un costado vigila atentamente una esfinge egipcia que, a pesar de sus 3500 años de edad, está bien conservada y es un fiel testigo de la historia de la ciudad. Es el lugar más concurrido del espacio y está plagada de turistas y soldados romanos disfrazados que le dan un aspecto colorido, alegre y de contemporaneidad.
Nada más lindo que disfrutar de la vista del mar a través de este paseo marítimo, si bien es de corta dimensión, en el se encuentran varios bares y restaurantes para relajarse con lindas vistas. Siempre hay algo que ver o que hacer, espectáculos, artistas callejeros o deportes de playa. Nos alojamos en el “Hotel Presidente” (4 estrellas) con media pensión.
Nuevo museo temático Muy cerca de las localizaciones de la serie “Juego de Tronos”, en Split, donde Daenerys mantuvo encadenados a sus dragones en la cuarta temporada, se abre el nuevo museo temático, con un total de 300 m2 de espacio interior y más de 100 piezas en exposición. Con paredes pintadas de negro, luces tenues y aromas a cedro y jazmín que crean un ambiente casi místico, el museo trata de transportarnos al mundo fascinante de aquellas épocas sombrías en el que está inspirada la serie. Se exhiben trajes, armas, cascos, escudos, banderas y espadas, como fragmentos y detalles de las filmaciones.
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Dejando la ciudad y las costas del mar, nos internamos en el país por medio de rutas secundarias, atravesando montañas y paisajes hermosos. Por la Ruta 56 hasta Dmis, luego la 33 hasta Knin. Por último la Ruta 1 hasta llegar a destino.
PARQUE NACIONAL DE LOS LAGOS PILTVICE
(Plitvicka Jezera) Está situado en la región de Lika, casi sobre la frontera con Servia y es un paraje donde se alternan lagos, cascadas y manantiales de espectacular belleza. Esta región fue declarada Parque Nacional en 1949 y catalogada en el Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1979. Tiene una superficie cercana a las 30.000 hectáreas, 22.000 de ellas cubiertas de bosques.
La zona que se puede visitar se encuentra en el centro del parque, son 8 km² de valles poblados de bosques, donde la hidrografía ha conformado un paisaje formado por 16 lagos de diferentes altitudes y comunicados por 92 cataratas y cascadas.
La visita se realiza a pie a través de senderos y puentes de madera, los lagos más grandes son recorridos por silenciosas barcas. Este lugar fue candidato a ser una de las siete maravillas naturales del mundo en el 2011 y ofrece siete rutas turísticas diferentes para recorrer el sistema de lagos. Suele ser considerado uno de los parajes naturales más bellos de Europa.
Gran parte de su fama la debe al fascinante color azul turquesa que adquiere el agua en algunos de sus lagos, la roca caliza de diferentes colores, el musgo o las algas son algunos de los protagonistas de este fabuloso paisaje de fantasía. Nosotros escogimos el itinerario “H” desde la entrada Nº2, que se completa en 4 a 6 horas y permite visitar la mayor parte del conjunto.
Todas las rutas incluyen trenecitos que cubren algunos trayectos y barcos que cruzan el lago Kozjak en la zona central. La estadía resulta fabulosa y aunque haga calor, por cierto, no llevéis trajes de baño porque está completamente prohibido meterse en el agua.
Continuar el viaje hacia el norte del país por la Ruta 1 hasta Karlovac y de allí la Autopista hacia el mar y destino final.
OPATIJA
Es una elegante villa vacacional frecuentada tanto en verano como en invierno, por su buen clima. Opatija es considerada como la cuna del turismo croata, era el lugar predilecto de la nobleza del antiguo Imperio austrohúngaro para pasar sus vacaciones. La ciudad sorprende por su historia, su cultura y sus magníficas villas e iglesias.
Opatija se identifica con una escultura de una muchacha con la gaviota que espera el retorno de alguien y que da la bienvenida a las rocas, en el paseo popular Lungomare. La ciudad se caracteriza por su encanto arquitectónico de estilo austro-húngaro y eventos en el que los visitantes regresan a la era de la corte imperial de Viena.
Villa Angiolina, construida en 1844, fue el hogar de los primeros turistas ganados por Opatija y hoy en día es el Museo Croata de Turismo que está ubicado junto a la Iglesia de San James, rodeados de parques impresionantes con más de150 especies de plantas raras, algunas de las cuales nacen en los rincones más remotos del mundo.
Nos alojamos en el “Hotel Continental” (4 estrellas) con media pensión, ubicado sobre la calle principal y comedor frente al mar, dos niveles más debajo de la calle.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------Saliendo de Opatija hacia el interior de la Península de Istria, que es un país distinto, dentro del mismo país Croacia, se toma la E751 hasta Lupograv.
Península de Istria. Es la más grande de todo el Adriático, esta región abarca tres países, se reparte entre Croacia, Italia y Eslovenia.El orgien de Istria tiene como protagonistas a los piratas, que habitaron esta península hasta que los romanos les expulsaron en el año 177 a.C., durante algún tiempo perteneció a las provincias de Italia, adquiriendo su cultura y su lengua, que hoy en día aún se percibe. Cuando el Imperio Romano desaparece, esta región fue dominada por los godos, los lombardos, los venecianos y finalmente por los Habsburgo. Después de la I Guerra Mundial Istria formó parte de Italia aunque al finalizar la II Guerra Mundial se la otorgó a Yugoslavia y por último a Croacia.
Desde Lupograv, a muy pocos kilómetros, por una ruta segundaria se llega a una extraña joya:
La ciudad de Hum. Recorrer sus encantadores rincones y calles medievales no lleva más de 2 horas por su escasas dimensiones y probablemente te cruces con todos sus habitantes que son oficialmente unos 17. Llama la atención su arquitectura urbana medieval en buen estado de conservación y que presume del título de la ciudad más pequeña del mundo.
El centro de Istria y el norte, sorprende por la cantidad de pequeñas localidades y gran número de villas medievales fortificadas encaramadas en lo alto de las colinas. Algunas de estas localidades que en el pasado obtuvieron la distinción de ciudades por su importancia, en la actualidad son encantadores pueblecitos que cautivan al visitante a primera vista.
Siempre por la Ruta E751 se atraviesa toda la región montañosa, con túneles, lagos y montañas. Paisajes muy bellos hasta llegar a la localidad de Okreti, donde se empalma la Ruta hacia el sur, destino Pula.
El lado occidental de la Isla, está detallado en el Blog de Viaje Nº 2 (de Barcelona a Croacia) al igual que la ciudad de Pula.
PULA
Situada en el extremo sur de Istria, Pula es la ciudad más grande de la península. El mayor atractivo de Pula son sus vestigios romanos. El principal, por sus dimensiones y su buena conservación, es el Anfiteatro conocido como Arena Pula que de inmediato impresiona la monumentalidad y el buen estado de conservación. Es el sexto más grande del mundo y el único que cuenta con cuatro torres y con los tres órdenes arquitectónicos clásicos perfectamente preservados en altura.
El anfiteatro fue construido durante la regencia del emperador Vespasiano en el Siglo.I y su aspecto apenas ha cambiado en 2000 años. El que en su día fuera escenario de las crueles luchas de gladiadores a las que llegaron a asistir hasta 20.000 personas, en la actualidad alberga representaciones teatrales y musicales. Las actuaciones son variadas, desde música clásica y ballet hasta conciertos de rock, pero quizás el evento más popular es su Festival Internacional de Cine que se celebra anualmente en el mes de julio.
Aparte del impresionante anfiteatro romano, hay otros monumentos que también pertenecen a la época romana como el Arco del Triunfo de los Sergios y el Templo de Augusto, situado en lo que fuera el foro romano.
Playas en Pula. En la península de Verudela (a unos 5 km del centro de la ciudad) se localiza la bonita playa Hawaii, una de las más visitadas. Un destino perfecto para disfrutar de la naturaleza y de las playas es la península de Premantura (a unos 10 km del centro de la ciudad), en el área natural de Kamenjak. Alejado de la civilización, a unos 2,5 kilómetros de la costa y del pueblo de Premantura, se localiza el faro de Porer
Dos veces visitamos la ciudad y puedo recomendar estos alojamientos: El “Hotel Galija” (3 estrellas) y el “Apart Hotel Lena” (3 estrellas) con una excelente atención.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------Partiendo de Pula se toma la Ruta 66 hacia el norte hasta la localidad de Labin. La costa oriental de la península, es menos turística pero no por ello menos interesante.
Labin. Una ciudad medieval a unos 3 km de la costa, situada en un lugar estratégico para divisar, y al mismo tiempo, evitar ser invadidos por el enemigo. Su centro histórico de callejuelas empedradas y pintoresca arquitectura de colores atrae al visitante en busca de historias mineras y de información sobre un antiguo habitante: Matías Flacius Illyricus, reformador y colaborador de Martín Lutero.
A partir de Plomin, la ruta 66 bordea el mar, con impresionantes paisajes sobre la Bahia de Rijecki Zaljev, frente a las paradisíacas islas de Cres y Krk.
Llegar a Opatija, retornando del periplo. Pasar por Rijeka, hermosa ciudad portuaria y tomar la Autopista E65 rumbo a la capital Zagreb.
ZAGREB
Fin del viaje (Plano de la Ruta de Viaje al final de las fotos.)
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