BLOG DE VIAJES 11
De Palermo a Palermo
Recorrida por el corazón de Sicilia
CARACTERISTICAS Caminos cómodos y transitados. Ciudades pequeñas y muy turísticas. Corazón de la cultura greco-romana.
HISTORIA Arquitectura etrusca y griega. Esplendor del Imperio Romano. Arquitectura medieval.
CLIMA Ideal todo en otoño y primavera. Desaconsejable durante el verano y el invierno por sus temperaturas extremas.
COMIDAS TÍPICAS Pastas, polenta y ricotas. Pizzas (no como las Argentinas). Cafés. Postres de arroz, de pan y facturas. Tiramizú y helados. Cannolis
RECOMENDACIONES Las Autopistas sólo se toman para hacer tramos largos y llegar con premura (no es aconsejable para conocer el país). En cada localidad, visitar la Oficina de Turismo local. El GPS es óptimo, pero nada se iguala a los planos a escala. Con el GPS marcar tramos cortos y reprogramar al próximo destino. Escuchar por radio, las estaciones locales, familiarizándose con el idioma. La siesta es rigurosa en el interior…todo cerrado desde el mediodía hasta las 15hs. Mucho calor, desde la primavera en adelante. En los Museos, sacar las entradas con anticipación. Largas filas para ingresar a museos y lugares famosos.
Es una isla encrucijada en medio del Mar Mediterráneo, en la mitad de Europa y Africa, sin pertenecer demasiado a ninguno. Casi todas las civilizaciones de la antigüedad dejaron a su paso una rica y variada herencia, que se manifiesta en una curiosa mezcla de idiomas, arte, costumbres y gastronomía. Aunque pertece a Italia, esta gran Isla, es única y por la sangre de sus moradores, corren vestigios de los fenicios, griegos, romanos, árabes, normandos, españoles y franceses.
PALERMO
Es la capital de Sicilia, una joya cubierta por el polvo de la historia, de las desgracias que han reportado los desastres naturales en forma de terremotos y del lastre que han provocado la miseria y los crímenes de la mafia. Si obviamos estos apuntes negativos, veremos una amalgama de calles y edificios notables, que forman un gran conglomerado de valiosas estrellas.
Ubicada sobre el Mar Tirreno (parte del todo Mediterráneo), el puerto, llamado La Cala, denota su orígen maritimo. Para un recorrido de dos o tres días (como mínimo) se marcan los principales lugares de interés.
Recomiendo el “Hotel Sitano” (4 estrellas) ubicado muy próximo al centro, con régimen de media pensión. La comida es muy buena y se puede saborear en la calle, en cualquier puesto o Trattoria. Imperdible los canolis de crema y pistachos y las frutas de mazapán.
Catedral de Palermo. Muy bella obra de arquitectura, Patrimonio Universal, es una verdadera joya que además tuvo una historia muy interesante ya que nació como basílica paleocristiana, pasó a ser mezquita y de nuevo iglesia. Esta mezcla cultural se vio reflejada en su estilo, donde se podrán diferenciar elementos árabes, góticos y barrocos. Se puede entrar gratis, pero cobran un ticket de 7€ para visitar el tesoro, las tumbas, las criptas y el techo. El altar de Santa Rosalía, patrona de la ciudad, es de plata y piedras preciosas y en el piso corre una línea decorada con mármoles, según el Equinoccio.
Quattro Canti (Piazza Vigliena). Es el cruce de dos calles muy concurridas, la Via Maqueda y Emanuelle que abren un armonioso espacio donde cuatro fachadas cóncavas de edificios del XVIII se articulan en tres ordenes, estatuas de los cuatro estaciones, cuatro reyes españoles y las cuatro santas palermitanas de cada distrito.
Mercados de Palermo. Son coloridos, auténticos y llenos de vida. Los más famosos son: el Mercato Vucciria, el Mercato di Ballaró, el Mercato Capo y Borgo Vecchio, siendo el primero el más animado. Su nombre deriva del francés, boucherie, es decir carnicería y creció a partir de los siglos X-y XII alrededor de la plaza Caracciolo y la vía Argenteria. Los puestos de frutas, pescados, carnes, quesos, especias y gangas, adquieren un halo mágico cuando cae la noche y los kioscos encienden sus enormes focos y la luz se refleja en sus carpas rojas. La mezcla de olores y colores es tan indescriptible como inolvidable.
Palacio de los Normandos. También llamado Palacio Real, se fundó en el año 1130 y es considerado la residencia real más antigua de Europa. La entrada es cara (12€), pero en su interior se puede apreciar una de las grandes joyas de la ciudad: la Capilla Palatina, llena de mosaicos dorados que muestran una decoración fastuosa.
Oratorio de San Lorenzo. Es otro sitio que sorprende por la diferencia entre su normal exterior y lo bello que es por dentro, repleto de estucos de estilo rococó preciosos. También se puede ver la reproducción de la “Natividad con San Francisco y San Lorenzo” de Caravaggio (el original fue robado en los años ’60 y nunca se recuperó). La entrada cuesta 2€.
Palacio Abatellis. Donde funciona la Galería Regional de Sicilia, con una extraordinaria pinacoteca de obras famosas de pintores italianos y extranjeros. Se destaca “La Anunciación” de Antonello da Messina.
Catacumbas de los Capuchinos. Se trata del cementerio de Convento de los Frailes Capuchinos, y donde se puede caminar entre tumbas y restos de cuerpos. La entrada cuesta 3€ y es una visita, obviamente, bastante macabra y no apta para gente sensible o claustrofóbica.
Iglesia de Jesús. Es una de las más queridas por los palermitanos, de estilo barroco, su interior es una explosión de mármoles, colores y ostentación decorativa. Desde afuera parece una iglesia cualquiera, pero el interior es una fiesta de lujo y belleza.
La Martorana (Concatedral de Santa María del Almirante), no solo es interesante desde el punto de vista arquitectónico (tiene elementos bizantinos, normandos y barrocos) sino que fue el lugar donde unas monjas inventaron la fruta Martorana (unos dulces de masa de harina de almendras y azúcar con forma de frutas).
Teatro Máximo. Es el mayor de los teatros de ópera de Italia y el tercero más grande de Europa. Está dedicado al rey Víctor Manuel II de Italia. De gusto neoclásico, fue inaugurado el 6 de mayo de 1897. Los exteriores del teatro, siguiendo la moda neoclásica de utilizar arquitectura antigua, presenta un pronao corintio hexástilo elevado sobre una monumental escalera. A los laterales de ésta se encuentran dos leones de bronce con alegorías de la Tragedia y la Lírica.
Imposible olvidar las escenas finales de la película “El Padrino III” con la tétrica escena del asesinato de su hija, en las escalinatas frontales.
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MONREALE
A pocos kilómetros de Palermo, se alza la Catedral de Monreale, Patrimonio de la Humanidad y uno de los monumentos más importantes de Sicilia, fue fundada por el rey normando Guillermo II en 1172 y es uno de los mayores logros del arte normando en el mundo. La catedral es famosa por los impresionantes mosaicos dorados que cubren todo su interior, en los que se pueden contemplar escenas tanto del Antiguo Testamento, como del Nuevo Testamento.
En el claustro, junto a la catedral, se levantan 228 columnas, decoradas profusamente, y rematadas en unos capiteles muy trabajados. Sobre estos se apoyan unos arcos que denotan una fuerte inspiración árabe. Entre los mosaicos, sobresale sobre el Altar Mayor la figura de Cristo Pantocrátor, típica representación de Jesús en el poder de su Gloria y bendiciendo al pueblo.
Precisamente en el interior de esta colossal iglesia, se filmó en 1972, las escenas del film de Franco Zeffirelli “Hermano Sol, Hermana Luna”, simulando el antiguo trono del Papa en Roma.
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Desde Palermo tomar Autopista E90 rumbo hacia el oeste, bordeando el mar, pasar por el Aeropuerto Internacional, la localidad de Alcamo y desviar por Autopista A29 rumbo a Trapani. A medio camino se baja por Ruta secundaria al Parque Arqueológico de Segesta.
SEGESTA
Este lugar, uno de los más fascinantes de la isla, es un gran predio sin desenterrar completamente donde abundan ruinas desparramadas. Según la leyenda fue fundado por los seguidores troyanos de Eneas. Su construcción comenzó entre el 426 y 416 a.C. y quedó incompleta.
Está dominado por un gran Templo Dórico, hermosamente preservado y completo, con sus 38 columnas y sin cubierta. Más alejados, restos del Teatro Griego, el Agora y las murallas de fortificación.
Continuando por la Autopista se llega a destino.
TRAPANI
Es una ciudad muy respetada por el turismo del jet set siciliano, de forma casi triangular, su vértice se proyecta hacia el mar dividiendo dos costas, hacia el norte, una seguidilla de playas muy sofisticadas y hacia el sur, el sector portuario y deportivo.
Pasear por las calles de la ciudad vieja, en particular, puede convertirse en una experiencia exultante si se tiene el gusto de reconocer el atrevido juego de superposiciones de estilos en la arquitectura y el eco de tantas culturas diferentes que se han alternado entre los estrechos callejones de los barrios populares.
En esta mezcla de Románico, Barroco, Liberty y de influjos árabes, normandos y españoles, que animan las fachadas de las Iglesias, los frontispicios de los edificios y cada rincón escondido del centro histórico, aún es posible percibir la presencia de un elemento que por encima de todos se impone y que une todo, y que es el mar.
A pocos kilómetros se puede ir en auto o tomando un funicular muy atractivo, por los paisajes que se divisan, y llegar a Erice.
ERICE
Está erigida sobre un peñasco y en la antigüedad era la sede del culto a Venus Erycina. Posteriormente se transformó en un hermoso burgo medieval circundado por murallas antiguas y caracterizado por casas de piedra, calles empedradas, portales historiados, plazoletas y ensanches, sobre los cuales se asoman varias Iglesias, entre las que cabe mencionar la Iglesia Madre (Chiesa Matrice), dedicada a la Virgen de la Asunción.
A la salida de Trápani, se visitan los campos de sal, en la denominada Reserva Natural de las Salinas de Trápani y Paceco, que son más de 17 grandes extensiones de recolección y decantación de sal marina, rodeando la localidad de Nubia.
Luego se toma la Ruta 115 hacia Marsala, atravesando paisajes repletos de viñedos y ubicados entre las montañas y el mar.
MARSALA
Situada en el promontorio del Cabo Boeo, es famoso en todo el mundo por el vino que lleva su nombre. Se pueden realizar interesantes visitas enológicas a las numerosas bodegas y establecimientos vinícolas llamados "baos" ("bagli") distribuidos en todo el territorio adyacente.
Muy cerca de Mazara del Vallo, un importante puerto marítimo e industrial dedicado a la elaboración y conservación del pescado, sugiero almorzar en uno de los tantos Paradores de Agriturismo.
Continuar el viaje, prolongado este día, por la Ruta E931, atravezando colinas y pueblos cercanos al mar, hasta llegar a destino.
AGRIGENTO
Es conocida como el lugar donde se alzaba la antigua ciudad griega e Acragante, una de las ciudades más destacadas de la Magna Grecia durante la edad de oro. Fundada por colonos griegos en el año 580 a.C. la ciudad tuvo un gran desarrollo económico y cultural; pero la dominación romana determinó su decadencia, la cual siguió también en los siglos sucesivos. Es muy interesante recorrer el núcleo medieval, con la Catedral y la iglesia de Santa María de los Griegos (Chiesa di S. Maria dei Greci).
Recomiendo el “Hotel Della Valle” (4 estrellas) con piscina y media pensión. La ciudad es muy animada y se puede recorrer el centro para tomar helados o saborear una Cassata Siciliana que es una tarta tradicional hecha a base de ricotta, azúcar, bizcocho, mazapán, fruta confitada y azúcar glas. A pesar de ser una receta simple, existen numerosas variantes locales, especialmente en su aspecto exterior, debido al estilo en la decoración de este dulce.
En Agrigento, conviene tomarse el día completo para recorrer sus Museos y el gran Parque Arqueológico.
PARQUE ARQUELOGICO DEL VALLE DE LOS TEMPLOS
Es una gran extensión de terreno donde se conservan el conjunto de templos griegos mejores conservados del mundo. El valle de los templos de Agrigento es Patrimonio de la Humanidad y está articulada sobre terrazas en lo alto de un altiplano, con una distribución urbanística en forma de damero.
El Templo de Juno Lacinia. Es del siglo V a.C. fue construido en el año 450 y conserva todas las columnas originales del lado septentrional y parcialmente la de los otros tres lados. La planta del templo tiene unos 38,15 metros de longitud y 16,90 metros de ancho.
Templo de la Concordia. Construido en los años 440-430 a.C. está considerado por su estado de conservación, uno de los edificios sagrados de la época clásica más notables del mundo griego. Este templo, al igual que el cercano de Juno, está construido sobre un basamento macizo cuya función era la de nivelar las irregularidades del terreno rocoso. Sobre un crepidoma de cuatro escalones, de 39,44 metros de longitud y 16,91 metros de ancho, se erige una muy bien conservada perístasis, que es el pórtico que rodea el naos, de seis por trece columnas de 6,72 metros de altura.
El Templo de Hércules. El edificio, de estilo dórico arcaico, se encuentra en un montículo rocoso cerca de la Villa Aurea. Está asentando sobre un crepidoma de tres escalones, que a su vez se levanta sobre una subestructura en sus lados norte y oeste, debido a la irregularidad del terreno. Es un templo períptero de proporciones inusualmente alargadas con 67 metros de longitud y 25.34 metros de ancho, con seis columnas en sus frentes cortos y quince columnas en las fachadas largas.
La Tumba de Terón. Es un monumento funerario del siglo I a.C. con planta cuadrada coronado por una torre con las puertas ciegas talladas en piedra calcárea y columnas dóricas, con capiteles jónicos en los ángulos.
El Templo de Júpiter Olímpico. Es un templo de orden dórico, considerado como uno de los mayores, en cuanto a sus dimensiones, de toda la Antigua Grecia. Se comenzó a construir en torno al año 480 a.C. y aún no se había finalizado cuando los cartagineses saquearon Agrigento en el 405 a.C, quedando inconcluso. El edificio estaba compuesto por siete semicolumnas en su fachada corta y catorce en su lado largo, unidas entre sí por medio de un muro perimetral exterior.
El conjunto incluía una serie de atlantes o figuras masculinas colosales de unos 7,5 metros de altura y su estructura se alzaba sobre un crepidoma o gran plataforma de cinco escalones, que medía unos 4,5 metros de altura sobre el nivel del suelo. Tenía un estilábato de 112,70 x 56,30 metros y una altura total de unos 20 metros. Completan el periplo tres templos menores: de Cástor y Pólux, el Santuario de las Divinidades y el Templo de Hefaistos.
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Dejar la ciudad de Agrigento e internarse en el centro de la isla, descubriendo paisajes hermosos, con zonas inhóspitas, sierras bajas y altas que no llegan a los 800 m de altura, pueblos diseminados, grandes y chicos y tierras cultivadas con mucho trigo y plantaciones de vid…la verdadera tierra siciliana. Tomar Ruta 640 hasta Caltanissetta, desviar y tomar la Ruta 191, para llegar a destino:
VILLA ROMANA DE CASALE
Es un área arqueológica extraordinaria, descubierta a fines del siglo pasado, pero renovado con gran impulso en 1950 y desenterrada en gran parte. Es una villa tardo-romana cuyos restos se sitúan en la localidad siciliana de Piazza Armerina y desde 1997 forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Es famosa sobre todo por la excepcional colección de mosaicos perfectamente conservados a través del tiempo, gracias a una capa de barro, producto de una inundación antigua.
Los restos conservados de la villa pertenecen al período de finales del siglo III d.C. y principios del siglo IV d.C, siendo posible que se tratara de una residencia palaciega vinculada con el emperador Maximiano. La villa excavada a medias, cuenta con una extensión de 4.000 m2 distribuida en más de cincuenta estancias, destinadas a diversas utilidades.
Puedo asegurar que la visita a estas ruinas, producen un estado indescriptible de sorpresa y admiración, solo comparable con las ruinas de Efeso y Pompeya.
Desde este hermoso lugar, seguir transitando por el corazón de Sicilia, tomando primeramente la Ruta 117bis y la 124 hasta Caltagirone, luego por la Ruta 683 avanzar un tramo y girar nuevamente por la 514 hasta destino. A pesar de estar muy bien señalizadas, conviene en estos tramos de cruces de rutas muy intrincados, valerse del GPS.
RAGUSA
Hermosa y antigua ciudad, ubicada sobre una colina de 300 m de alto. Entró en contacto con las cercanas colonias griegas, y se desarrolló gracias al puerto de Camerina. Después de un breve periodo de dominio cartaginés, fue administrada por los romanos y los bizantinos: estos últimos fortificaron la ciudad y construyeron un gran castillo. Ragusa fue ocupada por los sarracenos en el 848 y luego por los normandos.
En 1693 la ciudad quedó devastada por un enorme terremoto, que mató a muchos habitantes. Después de la catástrofe, fue ampliamente reconstruida, levantando en este período, muchos edificios del barroco tardío. La mayor parte de la población se trasladó al nuevo asentamiento llamado Ragusa Superiore y la antigua ciudad, con el nombre de Ragusa Inferiore. Hoy florecen como una unidad.
Estando en este simpatico lugar, recomiendo probar sus famosos arancini, unas bolitas de arroz, empanadas y fritas, rellenas de los más variados ingredients, y también, en la ciudad del chocolate, deleitarse con las barras clásicas y otros de sabores muy raros, como de naranja de Sicilia y limón, de mojito, de leche de coco, de jazmín o de pimientos fuertes.
Salvo Montalbano es un personaje ficticio y muy popular de la televisión siciliana y que ha trascendido al mundo entero. Creado por Andrea Camilleri, para resolver los casos más extraños en su región, sus andanzas se centran en esta ciudad. Mientras que, la morada del Comisario Montalbano se halla junto al mar en Punta Secca, la fracción costera de Santa Croce Camerina, al sur de Ragusa.
Desde Ragusa, tomar la E45 hasta Modica, Rosolini, Avola y llegar a destino
SIRACUSA
Declarada Patrimonio de la Humanidad, fue una de las ciudades más importantes del mundo griego y la más bella; poderosa potencia hasta el 211 a.C. cuando cayó bajo los romanos en una batalla donde murió el famoso matemático Arquímedes.
Hay tres grandes áreas por visitar: la península de Ortigia, que es el casco antiguo y acrópolis; el resto de la ciudad y el Parque Arqueológico, a las afueras.
Lo más emblemático de Ortigia, que bien se puede conocer en un día, pero seguramente no desearás marcharte de ella, por lo atrapante de su entorno prolijo, limpio y bello, son los siguientes monumentos. EL espectacular Duomo, la Catedral de Siracusa, construida entre finales del siglo XVI por el arquitecto siciliano Andrea Parma y de estilo barroco, maravillosamente encaramado en el antiquísimo Templo de Atenea, casi intacto en su interior. En las paredes de la iglesia, asoman las columnas originales del más puro dórico, dando la impresión de estar en la antigüedad.
En la misma plaza se alzan uno al lado del otro el Palazzo Arezzo della Targia, el Palazzo Beneventano del Bosco, el Palazzo della Sovrintendenza ai Beni Culturali y el Palazzo Chiaramonte, auténticas bellezas arquitectónicas del renacimiento y barroco siciliano. A pocos pasos de la catedral, se localiza la Chiesa di Santa Lucia alla Badia, que guarda un gran tesoro en su interior: el cuadro denominado “El entierro de Santa Lucía” pintado por Caravaggio en 1608. Toda una reliquia que además hace honor a la patrona de la ciudad: Santa Lucía.
Un poco al norte, las ruinas del Templo de Apolo, con sus columnas semienterradas e incompletas y la Fuente de Diana que representa al personaje de la mitología griega Aretusa. Bordeando por tres lados todo este entorno, la costanera sobre el Mar Jónico, con hermosas vistas, permite pasear y admirar esta hermosa ciudad, joya de la antigüedad.
En la ciudad nueva, nos sorprenderá la construcción de una Iglesia contemporánea, de osadas líneas: Nuestra Señora de las Lágrimas, El Sepulcro y la Iglesia de Santa Lucía, las Catacumbas de San Juan, el Museo del Papiro, el Museo Arqueológico y un Parque de diversiones Temático, inspirado en los inventos del gran físico griego Arquímides.
A las afuera de la ciudad, el Parque Arqueológico consta de: Un anfiteatro romano, casi completamente esculpido de la roca. En el pasado, albergaba animales salvajes y luchas de gladiadores. Un enorme Teatro griego que tiene capacidad para 20.000 personas y donde se realizan actividades artísticas en la actualidad. La Oreja de Dionisio (Orecchio di Dionisio). Es una antigua cantera de piedra caliza de más de 20 metros de altura. Su nombre proviene de la forma de la entrada, que se parece al interior de una oreja gigante. Cuenta la leyenda que Denys, el tirano de Siracusa, estaba allí para escuchar las conversaciones de sus prisioneros. En su interior el eco es impresionante. El Altar de Sacrificios de Hierón II, de 100 metros de largo y donde se mataban cientos de animales a la vez.. Las cuevas llamadas Latomias del Paradiso, donde murieron 7.000 atenienses, prisioneros tras la derrota del 413 a.C.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------Desde Siracusa, tomar carretera hacia el sur, tan sólo 32 Km y llegar a destino.
NOTO
El término árabe tiene el mismo significado que en italiano: Noto = Notorio, renombrado, famoso, como homenaje a la belleza y a la importancia de esta ciudad y que los sicilianos la llaman "el más hermoso jardín de piedra", quizás por la disposición en terrazas de su estructura urbana.
Noto ha sido reconstruida totalmente, a unos siete kilómetros de su ubicación original, tras un terremoto que en 1693 la dejó destruida. Para la reconstrucción fueron llamados grandes arquitectos formados en Roma, por lo que todos los edificios son de inspiración barroco-romano, aunque reinterpretados para esta región. El resultado superó todas las expectativas y la reconstrucción dio vida a un trabajo excepcional, utilizando la piedra volcanica de la zona, que recuerda el color de la miel.
Toda la luminosa ciudad es de estilo barroco y fue declarada Patrimonio de la Humanidad. Cada edificio es único y posee su propia personalidad. Se ingresa a la ciudad por la Puerta Real que permite acceder, por la calle principal al Corso Vittorio Emanuele al centro y que sorprende favorablemente con una disposición urbanística absolutamente distinta a todas las ciudades conocidas.
El Palazzo Ducezio y otros, a cual más hermosos, constituyen la arquitectura civil, mientras que una cantidad increíble de iglesias y conventos aportan la presencia religiosa. El Duomo, cuya fachada es asombrosa y su interior contrastante por su sobriedad, sufrió en el año 1996, y por causas estructurales, el derrumbe de la cúpula y gran parte del techo. Reconstruida la catedral, se inauguró el 30 de mayo de 2007.
Paseando por las callejuelas y próximo al mercadillo artesanal, recomiendo tomar el famoso “Moscato de Nono”, sentado en una de las tantas plazas aterrazadas e imaginarse que en sus calles, cada mes de mayo, se celebra un festival donde los artistas florales diseñan mosaicos, utilizando solamente pétalos de flores. Cubren completamente el suelo con sus composiciones.
De regreso a Siracusa, se retoma el viaje hacia el norte, bordeando la isla, por la Autopista E45 hasta llegar directamente a destino.
CATANIA
También destruido por el terremoto que acabó con todo el sur-este de Sicilia en 1693, la ciudad fue reconstruida casi totalmente, quedando pocos vestigios de sus raíces griegas, quienes la fundaron en el 703 a.C.
El paisaje hace referencia permanente del omnipresente volcán Etna, la montaña humeante. Declarada Patrimonio Universal, es la segunda ciudad de Sicilia, Son visitas inexcusables la Plaza de la Catedral donde se ubica el Comune y la Catedral de Catania, (el Duomo), dedicada a Santa Ágata, patrona de Catania, el Museo Diocesano, que conecta con las ruinas de los baños grecorromanos que yacen bajo la catedral, y donde se encuentran artefactos religiosos, retablos y obras pictóricas del siglo XIV.
Todos estos edificios están en torno a la Fuente del Elefante de Vacarini. El teatro romano y el odeón, en Via Vittorio Emanuele, son dos anfiteatros romanos que datan de la época imperial.
El teatro romano es el más grande de los dos, se extiende a lo largo de 102 metros y tiene un foso de orquesta al aire libre rodeado por pasillos curvados y una zona de asientos que podía acomodar a más de 7000 personas. Dobla en tamaño al odeón, que se sigue utilizando en la actualidad para conciertos y espectáculos de danza.
Además, se puede visitor el mercado de la Pescheria y el mercado de la Fiera, la Via Crociferi con su hilera eterna de iglesias, los Jardines Bellini, el Teatro Massimo Bellini, que debe su nombre al ilustre compositor local, la Via Etnea con sus comercios y heladerias, San Nicolo y el convento de de los Benedictinos (sede de la Universidad di Lettere de Catania), sin olvidar el castillo Ursino y la multitud de palacios barrocos que proliferan en Catania.
Recomiendo alojarse en el “Hotel Nettuno” (4 estrellas), con piscina y media pensión. Conviene aprovechar la estancia en Catania para deleitarse con la típica Pasta alla Norma, hecha con fusilli o rigatoni mezclados con tomates, albahaca, berenjena salteada, una buena cantidad de queso y ricotta salada y que debe su nombre al hijo predilecto de la ciudad, el compositor Vincenzo Bellini, autor de la admirada y reconocida ópera “Norma”.
Si tenemos la suerte de visitar Catania entre el 3 y el 5 de febrero, podremos participar en la multitudinaria fiesta en honor de la patrona de la ciudad, Santa Ágata, cuya fervorosa devoción no tiene parangón.
Visita al Etna
Naturalmente, lo que hace primordial a este lugar es un recorrido por el Etna, si su inscontante quietud lo permite. El monte es una imponente cumbre y un volcán activo situado entre las ciudades de Catania y Taormina, con 3300 metros de altura. Todos los días, salen autobuses a las 08:15 desde la estación de tren de Catania hasta el pie de la montaña. Tras un trayecto de una hora, se llega a la entrada sur de la montaña, llamada Rifugio Sapienza y desde ahí se puede subir caminando o en teleférico, los 1000 metros que distan del cráter, que no está habilitado para acercarse.
Desde Catania, se toma una ruta secundaria rumbo al volcán y al pie del mismo, existen una cantidad enorme de villas dedicadas a la degustación de productos rurales regionales. Una de ellas está ubicada en la localidad de Zaferana Etna.
Desde allí, se toma la ruta, perfectamente señalizada rumbo a la costa, para llegar a destino.
TAORMINA
Magnificamente ubicada y balconeando sobre el mar, la ciudad es el centro preferido del jet set mundial y la ventana al mundo de una Sicilia moderna e internacional. Es una delicia visitarla, por sus playas de arena fina, restaurants, negocios y hoteles de todas las categorías. El visitante quedará fascinado por la inmensa belleza de este lugar.
El Teatro helenístico de Taormina, transformado en arena, ofrece un espectacular panorama del mar azul turquesa hasta las costas de Calabria, de la ciudad de Siracusa y de la humeante cima del Etna, la Puerta Messina, el Palacio Corvaia y la Iglesia de San Pancracio (del siglo XVII) que surge sobre los restos de un antiguo templo griego. Hay que visitar también, no lejos de ahí, la cavea del antiguo Odeón y la cercana Iglesia de Santa Catalina de Alejandría.
En el centro, la Plaza IX de Abril, desde la cual se puede disfrutar de un espléndido panorama, mientras que la Puerta di Mezzo, abierta en la Torre del Reloj del siglo XVII, nos conduce al barrio medieval de la ciudad.
No se puede omitir un paseo a lo largo del Corso Umberto I, la vía principal de la ciudad, ideal para hacer compras; aquí se encuentran numerosas tiendas de artesanía que venden desde cerámicas hasta joyas, pasando por la ropa de todas las marcas famosas y los típicos souvenires. Para disfrutar un poco de tranquilidad, podemos recorrer las pintorescas callejuelas aledañas y los patios de la parte más vieja de Taormina. Es muy común asistir a los casamientos, por lo general viernes y sábados, en horas tempranas y compartir el glamour de sus invitados.
Continuando el viaje hacia la cercana Messina por la Autopista E45, paralela a la Ruta 114, que es mucho más lenta. Ambas, transitan unos 50 Km permanentemente urbanizados, con casas, departamentos, Iglesias, tiendas y edificios sobre el mar, en una franja de 200 o 300 metros de ancho.
MESSINA
Ninguna ciudad de Sicilia ha sufrido tantos terremotos y bombardeos, como el de la Segunda Guerra, y a pesar de ello, es hoy, una de las más pujantes de Italia. Esta ciudad está situada en el lado noreste de Sicilia y se encuentra separada del continente por el estrecho del mismo nombre. Sus principales fuentes de economía son el turismo de cruceros, sus grandes puertos marítimos y los productos agrícolas.
La plaza del Duomo es sin duda una de las principales atracciones de Messina, situada en las proximidades del puerto y donde atracan los cruceros. Dentro de la plaza se encuentra la Fontana di Orione, que es una fuente de agua ornamentada con muchas esculturas detalladas. La Catedral, como principal iglesia católica, el Duomo está en pie desde 1551 y fue construido originalmente por un renombrado arquitecto de Florencia que era en realidad un protegido de Miguel Ángel.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la catedral sufrió grandes daños y la versión que se ve hoy en día es una reconstrucción que se mantiene fiel a su diseño y materiales utilizados La Torre del Campanario se alza orgullosa junto al Duomo remasterizado y es igual de impresionante. Esta enorme torre tiene cuatro pisos separados y la parte superior es una torre de relojería con techo en punta. Su mecanismo es uno de los ejemplos más importantes en el mundo. Al mediodía, se puede ver el mecanismo en acción y las diversas figuras de oro en movimiento.
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Salir de Messina y tomar la Autopista E90 rumbo a Palermo. Esta ruta bordea la costa del Mar Tirreno, con una sucesión de paisajes inolvidables, entre las montañas del interior y las costas escarpadas, salpicados permanentemente con pueblos y lugares de vacaciones.
En determinados parajes, se siente un persistente olor a azufre. Es el resultado de gases que surgen de una de las zonas volcánicas más activas del mundo, la Falla de Sicilia. A frente, sobre el mar, las islas Eolias o Eólicas que constituyen un archipiélago volcánico y fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el 2000.
Por lo pronto, el Volcán Vulcano es uno de los más alto del mundo ya que está enterrado 2000m bajo el agua y emerge tan sólo 390m creando la isla del mismo nombre, muy próximo se yergue la Isla Strómboli, otro volcán en permanente humareda.
En estas islas se filmaron varias películas famosas. Basta recordar “Vulcano” con Anna Magnani, “Strómboli, tierra de Dios” con Ingrid Bergman y “El cartero” (Il Postino) sobre Pablo Neruda, con Philippe Noiret.
El viaje continua varios kilómetros más, cruzando puentes y túneles, hasta llegar a destino.
CEFALU
Es la pequeña joya de Sicilia, un lugar pintoresco con un trazado medieval y estrechas calles adoquinadas y dispuestas entre arcos que nos invitan a saborear su tranquilidad y a descubrir su historia, sus costumbres y su arquitectura. Su curioso nombre deriva del griego y significa cabeza, haciendo referencia a la zona más elevada o cumbre de la conocida Roca de Cefalú, un promontorio rocoso, de casi 300 metros de altura, a cuyos pies se halla el centro histórico de la localidad.
Llegando a la cima se pueden ver cuevas prehistóricas y el Templo de Diana, una construcción megalítica del siglo IX a.C. Del período helenístico-romano pertenecen las murallas aún visibles frente al mar. Los árabes conquistaron el asentamiento bizantino y la gobernaron hasta el inicio del siglo XI, cuando los Normandos reconquistaron Sicilia.
Los signos de la dominación normanda son tan numerosos que no es casual que Cefalú sea llamada la “ciudadela normanda”. El edificio que domina el centro de la localidad es su magnífica Catedral, que se accede subiendo 33 escalones, cifra que no es casual, ya que hace alusión a la edad de Cristo. La catedral está declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por su belleza normanda.
Justo en el muelle, se extiende la playa de Cefalú que es pequeña, pero fantástica para niños ya que se puede entrar fácilmente al mar, donde no hay rocas, sino fina arena. En el pequeño pueblo y a ambos costados existen numerosos hoteles, todos frente al mar.
Recomiendo para comer, entre tantas especialidades de pescado que les puede ofrecer la cocina local, probar las “anchoas de la duquesa”, un guisado hecho con anchoas, pan de molde, ajo, cebolla, perejil, aceite y vinagre, en cualquier restaurante del Corso Ruggero, que es la calle principal del casco viejo y marcaba los límites de la ciudad durante la Edad Media. Hoy se alinean iglesias barrocas, palacios nobles y las tiendas más elegantes de la ciudad.
En esta ciudad se filmó la multipremiada película "Cinema Paradisso" y "Malena"...ambas con música del recordado maestro Ennio Morricone.
Apenas 70 Km hasta llegar a Palermo y completar así la vuelta por la isla.
PALERMO
Fin del recorrido.